Epicureísmo: Filosofía de Jardín

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Este 6 de mayo, el investigador y profesor de Filosofía Fundamental, Centro de Autónomo de Investigación y Docencia, el Mtro. David Higuera Flechas, publicó su texto Epicureísmo: Filosofía de Jardín, un texto sobre el placer de cohabitar el mundo, en el número 389 del periódico Rojo y negro, «vocero de la Confederación General del Trabajo (CGT), una asociación de trabajadores y trabajadoras anarcosindicalista, de clase, autónoma, autogestionaria, federalista, internacionalista y libertaria». Este último texto constituye el tercero de una trilogía dedicada al helenismo, una TRILOGÍA HELENÍSTICA, que, empezando con los cínicos, pasando por los estoicos, aquí concluye con el epicureísmo. En sus textos, el Mtro. Higuera nos dice:

«Eleuteria, autarquía y parresía. Despojo de lo superfluo, suficiencia propia y expresión abierta, he ahí los constitutivos del proceso de liberación cínica, manifiestos, sin tanta palabra, con gestos simples, así: cuando un ministro del emperador vio comiendo lentejas a Diógenes, aquél le dijo a este: ‘si aprendieras a adular al emperador, no tendrías que comer tantas lentejas’; a lo que el cínico liberado respondió: ‘y si aprendieras a comer lentejas, no tendrías que adular al emperador’. La lógica del poder se desestructura».

«Para los estoicos no era problema el burn out o la depresión. Ellos no vivían en carne propia asuntos como los atascos en el tráfico, la inflación, los cada vez más calurosos veranos o el precio del último móvil en el mercado. Si no tenemos en cuenta esa verdad, es muy fácil interpretar erróneamente a los filósofos y hacerlos decir, con violencia, cosas muy distintas de las que ellos originalmente buscaron decir. [Los usos del estoicismo chic] dicen más de la crisis de nuestra cultura, que de la sabiduría de esta escuela filosófica».

«Pero lo interesante es que esta buena vida que los filósofos de jardín proponían implicaba una actitud hacia el mundo y los otros en la que se procuraba evitar el daño a los demás. Epicuro huía de la política, la riqueza y del poder, pues sabía que una vida de opulencia o excesos, el “vivir como rey”, se construye sobre el sufrimiento y el sacrificio de los demás: a diferencia de la República platónica, en el jardín no hay reyes».

⚫Para el PDF de esta trilogía completa, da clic aquí.

Agradecimientos a Miguel Movilla por la invitación.

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